En 2012, la violación en grupo, tortura y asesinato (a causa de las heridas recibidas) de Jyoti Singh, una estudiante de tan solo 23 años, provocaron el horror y la condena internacional, y el crimen se convirtió en uno de los referentes de la lucha contra las agresiones y el acoso sexual en India.
Desde entonces, tanto desde la sociedad civil como desde las autoridades, diversas iniciativas buscan cambiar las actitudes que permiten y encubren el acoso sexual, y especialmente, reclamar la seguridad de las mujeres en el ámbito público.
La tecnología cumple en este sentido un papel fundamental. Ya en 2017, el gobierno indio reclamó que todos los teléfonos móviles que se vendieran a partir de entonces tuvieran un botón del pánico incorporado para facilitar el acceso a ayuda de las autoridades en caso de emergencia.
Actualmente, se han contabilizado cerca de 40 apps de seguridad para las mujeres disponibles en el país. Entre ellas destaca Himmat, la app lanzada por la policía de Nueva Delhi para permitir a las mujeres contactar a los cuerpos de seguridad de manera rápida y eficaz.
Tras tres años de recorrido, a principios de 2018 se contabilizaron 30.821 usuarios registrados, un número bajo en una ciudad con cerca de 19 millones de habitantes. Por ello, se impulsó la reforma de la app para facilitar el registro y el uso en hindi, reafirmando el compromiso de las autoridades con las medidas para promover el fin del acoso sexual en el ámbito público.
Idioma: inglés, hindi